miércoles, 12 de diciembre de 2012

Andes. Perú. Cordillera Blanca. Nevados Pumahuacanca. Nuevas vías Pinto-Rosales y Morales-Marco. Parte II

Pumahuacanca principal (5563 m), cara noroeste, y Chico (ca. 5350 m), arista suroeste

En la cordillera Blanca peruana, el 16 de octubre de 2012, los guías Beto Pinto Toledo y Ángel Morales con los aspirantes a guía Jhonny Rosales Huerta y Marco Lliulla escalaron el nevado Pumahuacanca Grande por dos nuevas vías en la cara noroeste. Pinto y Rosales alcanzaron además todas las cimas del Chico, quizá vírgenes hasta entonces.

Nevado Pumahuacanca (5563 m), cara noroeste, vía Pinto-Rosales.
Foto Beto Pinto 2012


Dos días antes acamparon a unos 4400 m, medio kilómetro al norte de la laguna Tararhua, en la cabecera de la quebrada Rúrec. Formaban parte de un curso para guías y aspirantes a guía financiado por la Asociación de Guías de Alta Montaña del Perú (AGMP) y el CEAM, Centro de Estudios de Alta Montaña.

Dos días después los instructores Beto Pinto y Ángel Morales con los alumnos Jhonny Rosales, Víctor Hugo, Rubén Yabar, Ignacio Mamani, Renzo León y Marco Lliuya partieron del campamento a las 6:00 horas, rodearon la laguna Tararhua por la orilla oeste y una hora después llegaron a la base de dicha cara noroeste.

Aunque la pared es básicamente rocosa, llevaban material para escalada mixta. Pinto y Rosales eligieron una vía lógica directa a la cima por el centro de la cara. Empezaron con largos de cuerda de 30 metros, debido a la mala calidad de la roca y las piedras sueltas.

Jhonny Rosales en el cuarto largo de su vía con Pinto en la cara noroeste del Pumahuacanca.
Foto Beto Pinto 2012


En estas tiradas superaron una dificultad media de 5c+ (grado francés), por debajo de sus posibilidades calzados con botas para alta montaña. Hubo tramos donde colocaron algunos seguros, pero en la mayoría de las reuniones tuvieron que asegurar sus avances con la cuerda directamente al cuerpo; como antiguamente, sin anclajes a la pared.

Por lo expuesto de la vía sólo pararon una vez para hidratarse. En tres horas y media alcanzaron la cima. Desde aquí observaron a sus compañeros, que escalaban por distintas vías y se demorarían en llegar.

Primera ascensión al Pumahuacanca Chico y vuelta al grande

Para evitar enfriarse destreparon por la cara noreste hasta el collado con el Pumahuacanca Chico, recorrieron su arista suroeste y alcanzaron todas sus cimas. En una de estas dejaron un hito de piedras, porque no encontraron rastro de ascensiones anteriores.

Pinto y Rosales en la cima más septentrional del Pumahuacanca Chico (ca. 5350 m), círculo izquierdo. El círculo derecho señala la cima donde dejaron un hito de piedras.
Foto Koky Castañeda.


Volvieron a la cima noreste del Pumahuacanca principal(1) cuando Morales, cabeza de la segunda cordada, les gritó que Yabar y Hugo tuvieron un accidente. Destrepando la mayoría de las veces, llegaron por la arista noroeste hasta donde estaban los dos alumnos. Hugo tenía dos cortes en un dedo pulgar, así que le aplicaron primeros auxilios.

Descendieron luego todos por la nueva vía de Ángel Morales y Marco Lliulla, de dificultad general MD+. Las otras dos cordadas decidieron abandonar la escalada para asistir al accidentado. Llegaron todos al campo base sobre las cinco de la tarde.

Pinto y Rosales nombraron su vía de la cara noroeste del Pumahuacanca «El sexto teletubbies», de unos 320 m de recorrido y dificultad general MD+. Utilizaron una cuerda de 60 m, un juego de friends y algunos empotradores. No usaron los piolets, crampones, tornillos para hielo, estacas para nieve y clavos para roca que llevaban.

Escaladas peruanas en la cara noroeste del Pumahuacanca, entre las aristas noreste (izquierda) y noroeste.
Linea verde, escalada de Renzo León e Ignacio Mamani que termina en la arista noreste. Linea roja, vía de Beto Pinto y Johnny Rosales. Línea azul, vía de Ángel Morales y Marco lliulla. Linea amarilla, escalada de Victor Hugo y Rubén Yabar que termina en la arista oeste. El accidente ocurrió donde se unen las líneas azul y amarilla.
Foto Beto Pinto.


Notas

(1) Es posible que sea la segunda ascensión, desde el collado, de la vía Clark-McKeith

Comunicaciones personales (c.p.) y agradecimientos

Beto Pinto Toledo, Koky Castañeda

jueves, 6 de diciembre de 2012

Andes. Perú. Cordillera Blanca. Nevados Pumahuacanca. Orónimos y primeras ascensiones. Parte I

El nevado Pumahuacanca

La cima principal del nevado Pumahuacanca dista unos 3 km al SO de la cumbre del Uruashraju (ca. 5735 m) y casi 4 km al oeste del Shacsha (5703 m) o Shaqsha. Aunque se divulga que Pumahuacanca significa «weeping puma» (`puma que llora´ y `puma llorando´), o que el nombre «Pumawaqanka» quizá se deba a la forma de los picos (John F. Ricker, Yuraq Janka, 1977), su significado quechua real es el lugar `donde llorará el puma´.

La cumbre del Pumahuacanca recibe 5563 m en la edición de 1945 (reimpresión 1988) de la Alpenvereinskarte (DÖS), parte Sur, aunque la edición de 2005 le otorga los 5521 m —y el nombre Cerro Arhuay— de la hoja Recuay 20-i del Instituto Geográfico Nacional (IGN) peruano. El andinista italo-brasileño Domingos Giobbi también señala esos 5563 m en la publicación suiza Berge der Welt (BW) 1966-67.

De izquierda a derecha las dos cimas del Uruashraju Chico (5360 m), las cimas de la arista noreste del Pumahuacanca, el nevado Pumahuacanca (5563 m), y el denominado Cerro Pumahuagangan (5138 m) en la cartografía oficial peruana. Vista desde el noroeste.
Foto Sevi Bohórquez 1998
Digitalización Onofre García 2012


En vez de Pumahuacanca, el ING nombra «cerro Arhuay» toda la línea divisoria de esta montaña. En la cartografía oficial es el conjunto de cimas del cordal unido al noreste con el collado del Nevado Verdecocha 5722 m (es decir, el Uruashraju) y al suroeste con el del Cerro Pumahuagangan (5138 m) que baja hasta la pradera de entrada de la quebrada Rúrec.

Cabe la probalidad de que la denominación «Arhuay» corresponda a la cima noroeste desde la laguna Tararhua. Recuérdese que una misma montaña de la cordillera Blanca puede recibir nombres distintos, desde cada vertiente. El topónimo es castellanización de «arway», que en lengua quechua huaracina podría referir a enfriar o dar sombra. Quizá los cartógrafos entendieran arhuay donde oyeron «arwi», adjetivo que en quechua de Huailas significa de color `oscuro´. Es posible, porque se trata de un cerro rocoso de color parduzco y rojo oscuro con escasos neveros. Su cara noroeste tiene una estética forma piramidal vista desde la inhóspita laguna Tararhua, o Verdecocha en la cartografía oficial.

Porción de la Hoja Recuay 20-i con alturas del Instituto Geográfico Nacional (IGN) del Perú y toponimia de uso habitual por pobladores locales y andinistas.
Imagen Sevi Bohórquez (2012)


Primeras ascensiones y nombres de una misma cima

Tras el ascenso de Hugh R. Clark y Alistair McKeith el 24 de junio de 1969 rara vez se alcanza la cumbre del Pumahuacanca. Clark, afiliado al peruano Club Andinista Cordillera Blanca, anotó para The American Alpine Journal (AAJ) 1970:

Colocamos un campamento base en la cabecera de la quebrada, cerca de la laguna Tararhua, llena de restos de seracs que caían continuamente desde el glaciar colgante 1500 pies [457 m] por encima de la orilla este. [...] Llevamos un campo ligero a 16.000 pies [4877 m] a la base de la rampa que conduce al collado entre el Pumahuacanca y el Pumahuacanca Chico. El 24 de junio escalamos roca fácil hacia el collado y atravesamos unos 500 pies [152 m] sobre el flanco oriental de la cresta noreste y ascendimos directamente a la cima noroeste por nieve y largos de roca que requirieron alguna reunión. La cima del noroeste fue ligeramente más baja que la del sureste (18.252 pies) [5564 m]. La travesía por la arista cimera fue «on swiss-cheese water ice» y requirió alguna escalada artificial directa con tornillos de hielo.

De izquierda a derecha la masa glaciar del Uruashraju Chico (5360 m) y las cimas de la arista noreste (futuro Pumahuacanca Chico) del Pumahuacanca principal.
Foto Koky Castañeda 2012


¿Pumahuacanca Chico, o Uruashraju Chico?

Dos kilómetros al noreste de la cumbre del Pumahuacanca está la cima señalada como Pumahuacanca Chico (ca. 5400 m) en el mapa 3 adjunto al libro Yuraq Janka. Altura más precisa, 17.585 pies y 5360 m, indicó Giobbi en AAJ 1965 y en Berge der Welt (BW) 1966-67. Giobbi, sin embargo, lo nombró «Uruashraju Chico» tras alcanzar la cima con su hijo de 15 años, el italiano Carlo Mauri y el peruano Macario Ángeles el 29 de julio de 1964. El Pumahuacanca Chico y el Uruashraju Chico son, pues, en la actualidad, el mismo nevado con distinto nombre en la bibliografía y la cartografía.

Entre el Uruashraju Chico y el collado del Pumahuacanca principal hay una arista escarpada con varias cimas secundarias. Por su forma y por la elevación respecto a sus collados entre el Uruashraju Chico (5400 m ING, 5360 m Giobbi) y el Pumahuacanca principal (5563 m), este conjunto de cimas podría ser considerado desde ahora el Pumahuacanca Chico (ca. 5350 IGN); ya que por error o por acierto el nombre figura en el referido mapa 3 en contradicción con el texto del libro citado.

Ninguna de las cimas del Pumahuacanca Chico parece tener ascensiones registradas en las publicaciones periódicas especializadas de consulta habitual. Es posible que la primera ascensión de la arista y sus cimas sea la del 16 de octubre de 2012 por Beto Pinto y Jhonny Rosales; véase Parte II.

Principales fuentes consultadas

GIOBBI, Domingos. Uruashraju und Rurec gruppe der Cordillera Blanca, Peru. Berge der Welt 1966-67.
RICKER, John F. Yuraq Janka, 1977.
Revista Peruana de Andinismo y Glaciología, nº 7, 1964-1965.
The American Alpine Journal 1965, 1970.

Cartografía

Alpenvereinskarte. Cordillera Blanca Süd 0/3b 1 : 100.000. Ed. 1945 y 2005.
Instituto Geográfico Nacional, del Perú. Hoja Recuay 20-i E 1 : 100.000.
GIOBBI, D. opus cit..
RICKER, J. F. opus cit. Map 3.

Agradecimientos

Koky Castañeda, Onofre García